Golpe de campeón: Dani Olmo y Raphinha rescatan al Barça en su momento más crítico

Solo faltan 10 partidos para terminar la temporada. Y al Barça, el último esprint, se le está haciendo más largo que nunca. El partido ante el Real Club Celta de Vigo fue prueba de ello. Son una decena de duelos los que separan al equipo de Hansi Flick del anhelado triplete: 6 de Liga, 1 de Copa del Rey y 3 de Champions.

En un Montjuïc plagado de turistas en Semana Santa, el elenco culé protagonizó un drama que terminó felizmente por todo lo alto. Remontada espectacular (4-3), con doblete de Raphinha, desatado en la segunda mitad. Ferran Torres y Dani Olmo también aportaron su grano de arena en forma de gol. El mediapunta egarense y Lamine Yamal, revulsivos, cambiaron el signo del partido desde su entrada al terreno de juego, con un plus de energía que neutralizó el hat-trick de Borja Iglesias. Golpe de campeón y siete puntos de ventaja sobre el Real Madrid en el liderato de la Liga.

La nota negativa

La nota negativa del día, la lesión de Robert Lewandowski. El delantero polaco se retiró en el minuto 77 con una dolencia muscular en la parte posterior del muslo de la pierna izquierda.

Robert Lewandowski pugna por el balón con Ilaix Moriba en el Barça-Celta de Liga EFE

El técnico azulgrana, Hansi Flick, lamentó una nueva baja, ocasionada por el asfixiante calendario liguero y de Champions. A la conclusión del triunfo, el míster germano evitó mojarse en los micrófonos de DAZN sobre el estado físico del 9: "Hay que esperar. Mañana le practicarán una resonancia".

Por la familia Montal

Antes del pitido inicial, lo más destacable de un estadio sin alma fue el respeto mostrado en el minuto de silencio hacia la familia Camprubí, por el trágico accidente de helicóptero sucedido en Nueva York el pasado 11 de abril. A bordo iba Mercè Montal, nieta y bisnieta de los presidentes del Barça Agustí Montal padre e hijo.

Ferran Torres celebra su gol ante el Celta EFE

El primero adquirió los terrenos del Camp Nou. El segundo, fichó a Johan Cruyff, en el que se inspiró Pep Guardiola y ahora Hansi Flick. El Barça, que hasta ahora no se había pronunciado, salió con el debido respeto y advirtió Lewandwoski, pero el que no perdonó fue Ferran Torres en el minuto 12.

Jarro de agua fría

El tiburón consiguió su décimo gol en Liga recibiendo entre líneas, superando rivales y con un disparo cruzado desde fuera del área (1-0). Un Barça dominante pecó de despistado y a los tres minutos se dejó empatar por Borja Iglesias. El equipo de Flick era claro dominador del juego. El Celta esperaba en su propio campo.

Y así hacía daño. El tanto gallego vino por la banda izquierda, buscando al espacio al veloz Pablo Durán. Desde el lateral del área, el Panda se desmarcaba a la espalda de los centrales. Solo tenía que empujarla (1-1). A punto estuvo de meter el segundo igual, pero esta vez Szczesny optó por tapar el disparo y no interceptar el centro.

Pedri vale por dos

El Barça fue un equipo apagado, sin el hambre que le caracterizó durante toda la temporada. Parece que llega con las energías justas al tramo final. Prueba de ello fue la apatía generalizada en la primera parte. Solo Pedri intentó remar a favor. Hacía de 8 y de 6. Bajaba a recibir a la base y debía dar el último pase.

Pedri lucha por un balón en el Barça-Celta EFE

La segunda parte empezó como terminó la segunda. Frenkie de Jong seguía con su característica apatía. Falló y por su culpa llegó el segundo de Borja Iglesias en el 52'. El mediocentro neerlandés fracasó en su intento de despejar un balón en largo, y el Panda no desaprovechó el regalo. Se plantó en el área y clavó un tiro cruzado por bajo, pegado al palo (1-2).

Lamine y Olmo, al rescate

Flick reaccionó inmediatamente, mediante la entrada de Dani Olmo y Lamine Yamal, en lugar de Fermín López y Ferran Torres. Con esto, la preocupación degeneró en drama en cuestión de minutos. En el minuto 62, con todo el bloque azulgrana volcado en campo rival, Boja Iglesias aprovechó la rendija en la espalda de la defensa y se marchó completamente solo desde el círculo central, hasta batir a Szczesny (1-3). Primer hat-trick del ariete coruñés desde 2023.

Borja Iglesias celebra su hat-trick contra el Barça en Liga EFE

Las sustituciones en el bando barcelonista no tardaron en surtir efecto. En el 64', Olmo culminó una combinación entre Lewandowski, Koundé y Raphinha, que filtró un pase para el desmarque de ruptura del mediapunta egarense. El canterano azulgrana cruzó el balón al fondo de la red y reanimó a la grada de Montjuïc (2-3).

Raphinha empata el Barça-Celta de Liga con su primer gol del partido en Montjuïc EFE

La remontada exprés empezó a cobrar sentido en el minuto 68. El asedio azulgrana era inapelable, y Lamine puso uno de sus clásicos centros al corazón del área. Raphinha conectó a la perfección con el esférico y anotó el gol del empate de cabeza (3-3). 

Raphinha desata la locura

Iñigo Martínez evitó un susto que habría resultado catastrófico, al puntear el balón cuando se batía en carrera a campo abierto con Pablo Durán, que pugnaba por emular a Borja y dirigirse solo hacia portería. Robert Lewandowski, con molestias en la parte posterior del muslo izquierdo, dijo basta en el minuto 77 y abandonó el campo, sustituido por Gavi.

Dani Olmo conduce el balón, en plena remontada del Barça contra el Celta en Liga EFE

La lesión del delantero polaco ralentizó el ritmo. Aun así, el acoso y derribo azulgrana no cesó. Gavi tuvo en su cabeza el tanto de la victoria a la salida de un córner, pero no dirigió su remate entre los tres palos. Tampoco, Óscar Mingueza. El ex del Barça recibió un pase de cuchara de Alfon que había superado las manos de Szczesny, y con todo a favor, cabeceó directamente fuera. 

La histeria colectiva se apoderó de Montjuïc en los ocho minutos de prolongación. Yoel Lago dio una patada por detrás a Olmo en el interior del área, ocasionando su derribo. En primera instancia, el árbitro Mario Melero López no pitó penalti. Sí lo hizo tras recibir el aviso del VAR y revisar la acción en el monitor. En una carrera eterna, con paradinha incluida, Raphinha superó a Vicente Guaita con un tiro potente a media altura. Todo el barcelonismo estalló eufórico, pues el extremo brasileño amarró media Liga con un solo disparo.