Acoso a la carpa de S'ha Acabat! en la UPF
Dos años de cárcel para cuatro independentistas por el ataque a S'ha Acabat en la UPF
La Audiencia los considera autores de un delito contra el derecho de reunión, con el agravante de discriminación ideológica, y uso de violencia
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La Audiencia de Barcelona ha elevado a dos años de cárcel la pena impuesta a cuatro estudiantes independentistas por expulsar, a empujones y gritos de "fascistas", a miembros del colectivo constitucionalista S'ha Acabat de su carpa informativa en feria de asociaciones de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona (UPF) en 2022.
La Audiencia ha estimado parcialmente el recurso presentado por S'ha Acabat y ha elevado de 18 meses a dos años de prisión la condena de los cuatro jóvenes, al considerarlos autores de un delito contra el derecho de reunión, con el agravante de discriminación ideológica, y uso de violencia. Con esta nueva pena, tendrían que entrar en el presidio.
Agresión y expulsión del recinto universitario
Los acusados formaban parte de cerca de un centenar de simpatizantes secesionistas que, el 23 de febrero de 2022, acosaron y acorralaron a un grupo de estudiantes de S'ha Acabat en su parada en la feria de la UPF, hasta llegar a expulsarlos del recinto universitario.
El juez de lo penal que juzgó los hechos concluyó en su día que se trató un delito de coacciones. Ppero la Audiencia de Barcelona estima que es un delito contra el derecho de reunión, porque "no solamente se intimidó y se asaltó la carpa de la asociación", sino que se "agredió" a los miembros de S'ha Acabat "hasta acompañarles formando un cordón al exterior del recinto".
La Audiencia considera la concentración de estudiantes secesionistas no sólo "iba dirigida a sabotear la presencia en la feria de los miembros de la asociación S'ha Acabat, sino que ello viene motivado por entender que, aún siendo una asociación legalizada, su ideología justifica acciones hostiles e intimidatorias".
La sentencia destaca que, para los estudiantes condenados, "existía una clara equiparación entre lo español y lo fascista, por la conexión directa de ambos conceptos en sus eslóganes", y así justificaron su ataque contra una entidad que estaba "perfectamente legitimada" para instalar su parada en la UPF.
