Tarjeta amarilla: Jude Bellingham

Llegó como gran estrella procedente del Borussia Dortmund y durante sus primeros meses tuvo un comportamiento ejemplar. Además de que era una máquina de marcar goles, se comportaba con mucho respeto y deportividad ante los rivales. Llegó a ser la envidia del Barça, que lloraba las constantes lesiones de Pedri. 

De eso hace un año y medio. Jude Bellingham es hoy un futbolista odioso para cualquier rival. Su estancia en el Real Madrid le ha contaminado por completo. Además de que con el tiempo ha ido emperoando su juego, lo más preocupantes son sus malos modales. Este sábado, en la final de Copa de Sevilla, no paró de repartir leña, protagonizar enganchadas con jugadores del Barça y protestar por lo que él consideró ayudas arbitrales al conjunto azulgrana. 

Bellingham tuvo un comportamiento vergonzoso que se puede resumir en cuatro acciones. Primero, sus protestas en el túnel de vestuarios de forma airada, diciendo que todas las acciones divididad, de 50-50, el árbitro las señalaba "a favor de ellos". Una actitud llorona, impropia de un jugador de su nivel, y que encima falta a la verdad. Segundo, una entrada malintencionada sobre Éric García, después de que el central del Barça hubiese chocado con él en un lance anterior. La tercera, sus enganchadas con Gavi, al que habló de forma altiva, provocativa y tratando humillarle por su diferencia de tamaño. Y, en cuarto lugar, por una entrada criminal sobre Pedri, al que le pudo partir la pierna. Por menos, hay delincuentes en la cárcel. 

La entrada criminal de Bellingham sobre Pedri REDES

Además de todo esto, sobra decir que Pedri le pegó un baño de fútbol antológico. Bellingham nunca se acercó a las prestaciones del crack canario, no puede gobernar un partido como lo hace Pedri, ni posse su depurada técnica y habilidad para retener el balón o sortear contrarios. Es palmaria la jugada del primer gol. Bellingham pierde el balón --y no es raro, porque pierdes muchos-- buscando un pase en profundidad que ataja Cubarsí. El balón acaba en pies de Pedri y se saca de la chistera el zapatazo del primer gol. Jude, todavía te queda mucho que mejorar. Menos humos y más aprender a jugar a fútbol. Espabila. 

Bellingham estudia para ser como Pedri REDES