Un horno de pan

Un horno de pan CANVA

Gastronomía

El mejor pan de Tarragona se come en esta pastelería de Prades: "Todo lo trabajamos a mano y de forma artesanal"

El obrador distribuye a pueblos cercanos, pero no plantea convertirse en cadena

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Si un niño llega con un pan bajo el brazo, en un pueblo de Tarragona este pan puede ser uno de elos mejores. Y es que un pequeño obrador familiar de Prades ha conseguido hacerse un hueco en el panorama panadero de Cataluña

El Forn La Plaça, ubicado en el número 2 de la Plaça Major, ha sido reconocido con el premio al mejor pan de la provincia de Tarragona, un galardón que ha pillado por sorpresa incluso a su propio creador, Óscar Cazorla.

Tal y como ha confesado a los medios locales, fueron los amigos de este maestro panadero quienes le obligaron a presentarse a este particular concurso. Si no lo hacía, iban a hacerlo ellos sin que se enterara.

Una vez en el concurso que se celebra en la provincia, solo tuvo que hacer lo que mejor le sale: pan. Y fue así como se alzó con el título al mejor panadero de Tarragona.

Una serie de casualidades

Lo de su profesión también fue un poco por casualidad. Comenzó como una experiencia para aprender del resto de panaderos, acabó con el primer premio en las manos de este artesano del pan, que ahora representará a Tarragona en el certamen autonómico, en el que se reconocerá al mejor pan de Cataluña.

Cazorla asegura que no hay misterio ni fórmulas mágicas, basta con volver a los orígenes. Esto significa trabajar con harinas molidas a la piedra y recuperar cereales antiguos que ya se han dejado de usar para hacer pan. 

El secreto del mejor pan

El catalán asegura que utilizan masa madre 100% y le dan mucho reposo al pan, con fermentaciones de 24 a 48 horas. "Todo lo trabajamos a mano y de forma artesanal", aseveran. Su lema: apostar por la calidad por encima de la producción en masa.

El Forn La Plaça es un negocio familiar en el sentido más puro de la palabra. En él trabajan sus dos hijos, su mujer y su suegra. Y así les gustaría seguir.

Obrador de proximidad

Si bien reparten a los pueblos de alrededor, lo hacen porque cada vez quedan menos panaderos. Lejos de convertirse en una cadena o franquicia, sólo tienen tienda en Prades, por eso su obrador conserva el espíritu de cercanía que define a los pueblos pequeños.

Eso no quita que estén dispuestos a cambiar. Bueno, a mejorar. El año pasado, Cazorla decidió hace poco dar un paso más y formarse académicamente.

Un reconocimiento sorpresa

Fue esa formación la que lo llevó a cruzarse con los compañeros que le animaron a presentarse al concurso. Hoy, esa decisión se ha convertido en una recompensa inesperada. Un reconocimiento al que nunca quiso acceder, pero que una vez ha llegado le ha servido como chute de energía.

La confirmación de que hace un buen trabajo y que es valorada, más allá del pueblo. Se debe tener en cuenta, que Prades es un municipio pequeño, de 665 habitantes. Eso sí de un encanto que va más allá de este obrador.

Dónde está el mejor panadero

Conocida como la "Vila Roja" por el tono rojizo de su piedra arenisca, esta localidad es una joya medieval enclavada en las montañas de la comarca del Baix Camp. Su casco antiguo, declarado Bien de Interés Cultural, invita a perderse por callejuelas empedradas que conservan vestigios de murallas y portales como el Arc de Pons.

La Plaça Major, porticada y animada, alberga la emblemática fuente renacentista con forma de globo terráqueo y la iglesia de Santa Maria la Major, una construcción que combina elementos románicos, góticos y renacentistas. Desde este núcleo histórico, se accede a rincones como la "puerta falsa" de la iglesia o la plaza de la Pau, donde el tiempo parece haberse detenido.

Cómo es Prades

Más allá del casco urbano, Prades ofrece un entorno natural privilegiado. A tan solo dos kilómetros se encuentra la ermita de la Mare de Déu de l’Abellera, construida en el siglo XVI sobre una cueva en la ladera de un acantilado, desde donde se disfruta de vistas impresionantes del valle del río Brugent.

Las Montañas de Prades, que rodean la villa, son un paraíso para los amantes del senderismo, con rutas que conducen a parajes como la Roca Foradada o los Gorgs de la Febró. Además, el Parc Astronòmic Muntanyes de Prades, certificado como Destino Starlight, ofrece la oportunidad de observar el cielo nocturno en uno de los cielos más limpios de Cataluña. 

Cómo llegar

Desde Barcelona, toma la AP-7 en dirección sur hasta la salida 34 hacia Reus. Continúa por la C-14 y luego sigue las indicaciones hacia Prades por la T-704. El trayecto dura aproximadamente 2 horas y 15 minutos, dependiendo del tráfico.