El vestuario del Barça actual mata a los fantasmas del pasado: sin miedo a nada

Mentalidad. Esa fue la palabra más repetida por el vestuario del Barça tras remontar al Real Madrid en Montjuïc. En un cuarto de hora, el equipo de Hansi Flick se encontró con que perdía el clásico por cero goles a dos. A los 45 minutos, el marcador era de 4-2. Este equipo es una apisonadora en ataque, con un grupo de jugadores que quiere comerse el futuro y que, por juventud y agallas, olvida rápidamente el pasado.

Un pasado reciente, porque hasta hace cinco días el "palo" en Milán, tal y como recordó Gavi en zona mixta, fue "muy duro" y el más lejano. Atrás han quedado los años en que los fantasmas de Europa tambaleaban a los azulgranas. Esta generación de jugadores es insaciable y se repuso rápidamente para sentenciar la Liga.

"Hemos demostrado a la afición que tenemos una mentalidad muy buena", añadió Gavi, quien ya piensa en ganar la Liga matemáticamente en Cornellà. "En el campo del Espanyol no será fácil, pero saldremos con mentalidad positiva, que es quizá lo que nos ha faltado en el inicio", repitió el centrocampista de Los Palacios.

Victoria encajando tres goles

Otro de los que habló fue Éric García, quien sufrió más los errores de su propio equipo al ser defensa. "Encajar dos goles no estaba en el guion. Ya son varios partidos que empezamos por abajo. Era duro porque sabíamos que si nos íbamos arriba dejábamos espacio. Pero hemos demostrado que sabemos sobreponernos a las adversidades", remarcó el central de Martorell, ubicado en el lateral.

Éric García celebra su gol en el Barça-Real Madrid EFE

Ferran Torres, al lado de Éric en los micrófonos de Movistar, le dio importancia al "espíritu" del equipo, ese que no tenía el Barça en las últimas temporadas, como quedó demostrado en Europa, en estadios como Anfield, el Olímpico de Roma o Turín.

"No sé qué hay en el equipo que conseguimos darle la vuelta. "Sabes que al Madrid no le puedes dar vida y se la hemos dado. Hemos sufrido, pero es el espíritu de este equipo", dijo el tiburón.

Mucha autocrítica

Raphinha siguió la línea de sus compañeros y fue muy autocrítico, a pesar de irse con un doblete. "Podría haber marcado más de dos goles. He fallado tres que no puedo fallar. Soy de los que se queda con estas ocasiones. Tengo una exigencia muy alta. Pienso más en lo que he fallado que en las que he marcado", aseguró el 11 del Barça.

Los futbolistas del Barça celebran un gol al Real Madrid EFE

Raphinha fue el futbolista mejor valorado del partido, aunque recibió el trofeo a desgana: "El MVP se lo daría a otros jugadores, pero lo agradezco. A Lamine, a Cubarsí,... Pedri para mí es MVP en todos los partidos. Creo que he estado por debajo de todos".

El extremo de Porto Alegre remarcó que todos los partidos tienen que ser importantes, no solo los de la Copa de Europa. Aun así, Lamine Yamal insistió en su promesa. "Se lo dije a mi madre. La Champions se juega cada año. Lo seguiremos intentando hasta que la ganemos. Así que muy bien todo, muy contentos", afirmó.

"Corregir los pequeños detelles"

A pesar de la felicidad por el 4-3, Lamine no obvió la autocrítica: "Tenemos que corregir los pequeños detalles, los goles que regalamos. No nos han hecho ocasiones muy claras, pero estamos contentos". Raphinha valoró el clásico como un "golpe definitivo".

Pedri protege un balón en el Barça-Real Madrid EFE

Pedri, por su parte, también puso deberes al equipo para la próxima temporada: "Imaginaba un partido más cómodo, con menos goles. Hemos entrado muy mal al partido y a partir de ahí hemos tenido toda la temporada la capacidad de remontarlos".

Cumpleaños perfecto

Gerard Martín, uno de los protagonistas inesperados del tramo final de temporada, aseguró que una victoria contra el Madrid siempre sabe mejor. Pero fue Fermín López, quien cerro un aniversario perfecto --hizo 22 años-- el que aseguró que "este año hemos estado mejor en los clásicos".

Fermín López celebra su gol anulado por mano en el Barça-Real Madrid EFE

Aun así, concluyó que lo de "hoy solo es un pasito y nos queda lo último ganar el jueves". E insistió, como todos sus compañeros, en la misma idea: "La mentalidad del equipo es ganadora. Nos hemos sobrepuesto muy bien y hemos merecido la victoria".